martes, 25 de diciembre de 2007

¡Qué año, Venezuela!


Atrás quedó la era en la que Venezuela era considerada la "Cenicienta" de Sudamérica. El trabajo dirigencial llevado a cabo en los últimos años necesitaba de hechos concretos que hicieran ruido a nivel continental. Y tal vez haya sido 2007 el punto de inflexión, del gran despegue futbolístico que cambiara definitivamente la mirada extranjera hacia la federación de ese país (FVF).

Todavía no es momento para hablar de conseguir títulos, aunque el avance de Venezuela en este deporte quedó demostrado en la gran actuación de la "Vinotinto" en la Copa América de la que fue anfitriona. Cerró el Grupo A en el primer puesto y, si bien fue eliminada contundentemente por Uruguay en cuartos de final (4-1), el simpatizante del combinado local quedó más que satisfecho con la actuación de los dirigidos por Richard Páez.

Por otro lado, el andar de la Selección por las Eliminatorias Sudamericanas invita a soñar con su primera clasificación a un Mundial. Luego de un sorprendente triunfo como visitante ante Ecuador, la "Vinotinto" cayó previsiblemente ante Argentina y frente a Colombia, para luego superar en un partidazo a su similar de Bolivia.

Con seis puntos en cuatro fechas, el selectivo venezolano ocupa el quinto lugar y, por ahora, accede al repechaje para Sudáfrica 2010. Claro que la competición recién comienza, y el equipo deberá adaptarse al cambio de técnico, ya que César Farías fue confirmado como reemplazante de Páez.

Pero no solamente la "Vinotinto" aprendió a pisar fuerte en Sudamérica, sino que además los clubes de la FVF ahora inspiran más respeto. El Caracas, flamante campeón invicto de Venezuela, dio la gran sorpresa de la Copa Libertadores 2007 al dejar en el camino a un gigante como River de Argentina y clasificar a octavos de final, donde quedó eliminado por el poderoso Santos brasileño, al que no obstante hizo sufrir demasiado.

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