Otra vez tendrá Lionel Messi, a sus 21 años, que conformarse con el reconocimiento de ser el segundo mejor del mundo para la FIFA y estar atrás del ultra ganador del 2008, Cristiano Ronaldo, en la entrega de un galardón, al igual que como sucedió hace semanas con el Balón de Oro.
No le bastó a La Pulga compensar un primer semestre austero y sin títulos con el Barcelona, con 20 goles anotados en el primer semestre de la nueva temporada, su repertorio de genialidades y liderazgo futbolístico con la 10 del aniquilador Barça pegada en la espalda. A la hora del balance final, el máximo organismo del fútbol mundial ponderó el póker de conquistas que celebró CR7: Community Shield, Champions League, Premier League y Mundial de Clubes. Ah, y los 42 goles que festejó, sin ser un cazador del gol, en la temporada 2007/08 también debieron pesar para coronarse como el mejor de todos.
Me parece justa la elección del portugués. Así como ahora se elogia y aclama la terrible performance de Messi desde que empezó la nueva temporada, durante el primer semestre del 2008 Cristiano Ronaldo se cansó de gastarla, hacer goles, brillar en Inglaterra y en toda Europa, descontando una regular Eurocopa. Fue el factor desequilibrante del muy buen equipo de Ferguson e hizo lo que quiso con la pelota en sus pies. Arrancó lesionado la segunda parte del año y con un nivel mermado, más preocupado por tirar chiches y lujos individuales (aun más que antes).
De extender este nivel sobrenatural, mantener su relación con la pelota y pulir sus ya increíbles estadísticas con algún título nuevo para el Barcelona, Messi debería correr con el mismo destino que el ex Sporting Lisboa y dejar de ser el segundo mejor futbolista del mundo, después de dos años manteniéndose en ese prestigioso lugar de elite, para ser el primer argentino en alzarse con esta distinción y poner el mundo a sus pies.
0 comentarios:
Publicar un comentario