El Matador se imponía desde el inicio con goles de Carlos Luna (PT 6m) y Martín Morel (PT 12m) y el Xeneize encontró la igualdad por intermedio de Sebastián Battaglia (PT 22m) y Jonathan Blanco, en contra (PT 28m). Pero apareció de nuevo Morel (PT 32m) para la visita, la primera en llevarse un triunfo de La Boca en un año y cuatro meses. Battaglia fue expulsado.
Tigre logró este domingo un enorme triunfo por 3-2 frente a Boca en la Bombonera, un bastión en donde el local no caía desde hace un año y cuatro meses. El partido fue vibrante, sazonado con cinco goles y una expulsión.
A los seis minutos, cuando aún nada había sucedido, llegó un centro desde la derecha del Matador, el rechazo y el pase a Carlos Luna quien, con Mauricio Caranta a mitad de camino, definió con un tiro alto sin oposición. Y si la zozobra ya se había adueñado del local, el verdadero baldazo de agua fría llegó a los 12, cuando el inspirado Martín Morel ejecutó un tiro libre esquinado a la izquierda de un estático Caranta.
Pero entonces el conjunto de Diego Cagna se retrasó demasiado y el Xeneize se lo llevó por delante con todas sus variantes ofensivas. Un cabezazo de Lucas Viatri que pasó muy cerca fue la antesala de lo que sucedería a los 22: Rodrigo Palacio envió un centro muy cerrado desde la derecha, manoteó Daniel Islas, cabeceó Viatri en el segundo palo y Sebastián Battaglia sólo tuvo que empujarla a la
Tigre logró este domingo un enorme triunfo por 3-2 frente a Boca en la Bombonera, un bastión en donde el local no caía desde hace un año y cuatro meses. El partido fue vibrante, sazonado con cinco goles y una expulsión.
A los seis minutos, cuando aún nada había sucedido, llegó un centro desde la derecha del Matador, el rechazo y el pase a Carlos Luna quien, con Mauricio Caranta a mitad de camino, definió con un tiro alto sin oposición. Y si la zozobra ya se había adueñado del local, el verdadero baldazo de agua fría llegó a los 12, cuando el inspirado Martín Morel ejecutó un tiro libre esquinado a la izquierda de un estático Caranta.
Pero entonces el conjunto de Diego Cagna se retrasó demasiado y el Xeneize se lo llevó por delante con todas sus variantes ofensivas. Un cabezazo de Lucas Viatri que pasó muy cerca fue la antesala de lo que sucedería a los 22: Rodrigo Palacio envió un centro muy cerrado desde la derecha, manoteó Daniel Islas, cabeceó Viatri en el segundo palo y Sebastián Battaglia sólo tuvo que empujarla a la
Enseguida, a los 28, Jesús Dátolo volvió a aprovechar el sector
Pero las falencias en la contención del mediocampo local y el buen
Luego, el encuentro fue tan eléctrico como parejo. Juan Román Riquelme intentó pero se tópó con Islas, al igual que Rusculleda frente a Caranta. Pero faltaba la polémica: Battaglia bajó a Rusculleda en el círculo central y se ganó la roja directa, aunque la falta era para amarilla.
La segunda mitad tuvo más de amagues que de contundencia. Sin embargo, la emotividad siguió a la orden del día. Riquelme no lograba hacer pie firme en la creación y no encontraba a quien asociarse en el ataque. El juego lateral de Boca fue prácticamente nulo, y los ingresos posteriores de Cristian Chávez y Leandro Gracián no cambiaron el panorama.
Sebastián Rosano alertó con un centro desde la derecha que cayó en el techo del arco y a Morel se lo ahogó Caranta. La más clara de un Xeneize que buscaba con más garra que juego fue una escapada de Viatri que derivó en un tiro desviado. Lo demás fue un ida y vuelta vertiginoso pero sin llegadas de real peligro.
Los cinco minutos de adición le otorgaron un sufrimiento final al encuentro, que terminó sin más movimientos en su marcador. Tigre había roto el maleficio de la Bombonera y Boca la posibilidad de seguir bien prendido aún con un partido menos. Y había ganado más de una preocupación respecto a su
0 comentarios:
Publicar un comentario